El futuro de los hologramas

Alex Kipman, ingeniero de profesión, presenta en una conferencia el primer ordenador holográfico sin ataduras: HoloLens de Microsoft

 Conferencia de Alex Kipman:

 http://www.ted.com/talks/alex_kipman_the_dawn_of_the_age_of_holograms

   Actualmente, los seres humanos nos hemos reducido a vivir en 2D, interactuamos con la tecnología como si fueran máquinas. Nos comunicamos con otras personas, entretenemos y gestionamos nuestras vidas a través de una pantalla detrás de la cual pasamos la mayor parte de nuestro tiempo. ¿Qué le pasó a eso de interactuar unos con otros en persona?

   Estamos limitados por un mundo 2D de monitores y píxeles. Esta limitación y el deseo de conectar con las personas es lo que me ha inspirado a la creación de una nueva realidad: una realidad en la que la gente, no los dispositivos, sean el centro de todo, una realidad en la que la tecnología detecte lo que vemos, tocamos y sentimos Una realidad en la que la tecnología no se interpone entre nosotros, sino que se apoya en nosotros.  Una tecnología que permita a la gente actuar más como personas, productos que permitan interacciones naturales, controles de voz o biométricos

   Las HoloLens de Microsoft son la primera computadora holográfica totalmente sin ataduras.

Dispositivos como este traerán contenidos 3D holográficos a nuestro mundo, mejorando la manera en que experimentamos la vida más allá de nuestra gama ordinaria de percepciones. Se podría pensar que estará disponible en un futuro lejano, pero estais muy equivocados. HoloLens ya ha sido utilizada por compañías de automóviles como Volvo, universidades como Case Western o, incluso, la propia NASA ha cambiado la forma de explorar los planetas con las HoloLens.

   Sin embargo, HoloLens no es más que el incio de un mundo desprovisto de la tecnología 2D que nos espera en un par de generaciones. En este mundo, la tecnología nos entiende. Donde vivimos, trabajamos y nos comunicamos, con herramientas que mejoran la experiencia humana, no máquinas que limitan nuestra humanidad.

   Pero, ¿cómo interactuaría esa máquina con la realidad?. En primer lugar, como una máquina, Yo observaría o asimilaría la realidad. El reconocimiento de voz y la autenticación biométrica son grandes ejemplos de una máquina que interactúa con los humanos desde una perspectiva de entrada. En segundo lugar, como una máquina, podría poner la información digital, o la información de salida, en la realidad mediante hologramas. Dicha máquina podría, por increíble que parezca, intercambiar energía con el mundo a través de la háptica, incluso llegando a imitar las sensaciones de calor y suavidad.

   Durante la conferencia, somos testigos de la conversación establecida entre Kipman y un trabajador de la NASA, el doctor Jeff Norris. Un Jeff Norris que está hablando con Kipman, esta en una habitación de hotel al otro lado de la calle y está en Marte al mismo tiempo, eso sí, mediante hologramas de su persona.

   Se trata de una réplica holográfica precisa de este planeta, construida a partir de los datos capturados por el Curiosity Mars Rover, que permite explorar con tanta facilidad el planeta rojo como cualquier lugar de la Tierra. Entre otras aplicaciones en este sector se encuentra el diseño de la próxima generación de una nave espacial.

 

 Opinión personal Innovando a mil por hora

El mundo esta avanzando de forma exponencial, y debemos adaptarnos a todos esos cambios. Pronto, se generalizará el uso de los hologramas y muchas empresas empezarán a aprovecharse de ellos para publicidad, o incluso, para darnos muestras holográficas del producto que veamos por Internet. 

 

Juntando estos avances con lo avances en robótica acabaremos convirtiendo el mundo en una cosa muy diferente a como es ahora mismo, podremos volver del trabajo e instantáneamente estar en las playas de Hawai viendo el atardecer para relajarnos, o estando en la primera grada de un partido de fútbol o baloncesto. 

 

Imaginaros un colegio ¿Cómo sería?,¿todos los niños con atendiendo a un profesor holográfico que funciona de forma automática o un profesor de carne y hueso que utiliza como ejemplo hologramas que son capaces de moverse y dar vida a sus explicaciones?, incluso podría cambiar la forma de hacer los deberes o de estudiar. Las posibilidades del futuro que nos espera son práticamente infinitas y debemos de estar preparados para lo que se nos venga encima.

 
La nueva realidad que narra Alex Kipman en su conferencia no podría tener un significado más literal. Comenzar a utilizar hologramas, cambiaría por completo nuestra concepción del mundo y nuestro día a día y serviría, sin duda, para acercarnos más los unos a los otros y ampliar nuestros horizontes y descubrimientos.

 

Internet podría estrellarse

  Danny Hillis, ingeniero, científico, autor, inventor..., nos descubre la necesidad de crear otro sistema para poder sobrevivir en el caso de que Internet fallase.

Conferencia Danny Hills:

http://www.ted.com/talks/danny_hillis_the_internet_could_crash_we_need_a_plan_b#t-56368

 

En 1982 existía un libro donde se recopilaban los nombres, direcciones y teléfonos de todas aquellas personas que tenían correo electrónico. Un sentimiento básico de confianza impregnaba toda la red por aquel entonces, y había una sensación real de que podíamos depender unos de otros para todo.

En aquellos días también había una actitud de tomar sólo que se necesitaba realmente, y, de hecho, no solo en la gente de la red sino que en realidad estaba en los protocolos de la propia Internet: “De cada cual según su capacidad, a cada cual según su necesidad”.  En cierta forma, dependíamos de la gente y ese fue el bloque constitutivo. Tuvo tanto éxito que no hay manera de hacer un libro con todos los correos electrónicos en la actualidad. Ya no por tamaño, sino porque a la gente no le gustaría que se publicase su nombre, dirección o teléfono.

Pero el hecho es que hoy en día hay mucha gente mala en Internet, y lo sobrellevamos mediante comunidades amuralladas, subredes seguras, VPNs, pequeñas cosas que no son realmente Internet pero que están hechas de los mismos bloques constitutivos. Eso significa que es vulnerable a cierto tipo de errores que pueden ocurrir o cierto tipo de ataques deliberados pero incluso los errores pueden ser algo malo.  

El problema viene porque la gente hace hincapié en defender sus ordenadores en Internet y no a defender el propio Internet como medio de comunicación. Y allí es donde se debe de poner más interes porque es donde hay más fragilidad y es de lo que depende todo el sistema mundial de economía, finanzas...

Para solucionar los problemas de internet se debe apagar todo el sistema, lo que actualmente es inconcebible y por eso necesitamos un plan B. Hemos contruído este sistema del que entendemos todas sus partes pero las estamos usando de maneras muy, muy diferentes al uso esperado y está adoptando una escala muy, muy diferente de esa para la que fue diseñado.

Actualmente, no sabemos cuáles serían las consecuencias de un ataque certero por denegación de servicio sobre Internet y por eso necesitamos un plan B. Hoy no hay un plan B. No hay ningún sistema de respaldo claro que hayamos mantenido con mucho cuidado para independizarnos de Internet, que esté construido completamente por distintos bloques constitutivos.

Esto no tiene que ser un proyecto gubernamental de miles de millones. Técnicamente es relativamente fácil de hacer porque se puede usar las redes de fibras que hay en el terreno y la infraestructura inalámbrica existente. Sólo es cuestión de decidir hacerlo. Pero no se toma la decisión de hacerlo hasta que no se reconoce la necesidad de hacerlo y ese es el problema que tenemos ahora mismo.

 

Opinión personal:

Adiós, mundo cruel

Mi opinión acerca de esta conferencia es que es cierto que actualmente demasiadas cosas dependen de internet y el mundo se esta creando alrededor de él, lo cuál es algo realmente malo debido a que si ocurriese un fallo y hubiera que reiniciar al sistema o apagarlo durante una semana o algo por el estilo, la gente entraría en pánico ya que la mayoría de las personas están enganchadas de alguna forma a él.

Ahora mismo, hay miles de hackers que podrían hacer caer una parte de Internet y que, si lo quisieran y se coordinasen podrían tirar el sistema abajo y habría que hacer vida después que eso porque todo "funcionaba perfectamente".

Necesitamos algo por si algo de esto ocurre, almenos para tener un sistema secundario hasta que arreglen el principal, como tener linternas por si se va la luz en la noche. No sería tan difícil de realizar, solo necesitan que los gobiernos se enteren de que un sistema tan frágil puede caer en cualquier momento y que inicien un proyecto para solucionar este problema, solo por si acaso. 

 

¿Los videojuegos podrían salvar el planeta?

Hoy vamos a hablar acerca de una conferencia que realizó Jane McGonigal, una diseñadora de juegos del Insituto para el Futuro en 2010. La conferencia sobre la que voy a hablar la podéis encontrar aquí.

La conferencia trata de como el jugar a videojuegos esta creando a una generación de jugadores extremadamente buenos en cosas que podrían ayudar a salvar el mundo.

Actualmente, dedicamos unas 3 mil millones de horas por semana a los videojuegos, parece mucho pero en realidad el estudio realizado por el Insituto para el Futuro dice que debemos aumentar esa cifra notablemente, hasta alcanzar los 21 mil millones de horas por semana.

A continuación nos mostró esta foto

 Lo que muestra es a un jugador a punto de alcanzar lo que se llama como un "epic win" que no es más que un resultado extremadamente positivo de una situación que no pensábamos que fuera posible. Según su estudio los videojuegos nos hacen creen que de verdad somos buenos en algo y no entremos en depresiones o cosas por el estilo, además los videojuegos nos reportan un "feedback" que es como se nombra a cosas como por ejemplo subir de nivel o subir atributos, lo que sería en la vida real hacerse mejor en algo. El problema viene de que en la vida no aparece un mensajito diciéndonos que hemos subido de nivel ni nada por el estilo, asique esa felicidad por saber que eres mejor no existe.

Los jugadores juegan a los videojuegos para evadirse de una vida que no reporta nada de felicidad o emoción y se introducen en esos mundos para sentirse importantes y buenos en algo. Los jugadores invierten aproximandamente unas 10.000 horas jugando a videojuegos hasta los 21 años, eso es el mismo tiempo que invierten en el colegio e insituto, lo que significa que mientras aprenden cosas en los videojuegos y a valorarse en la escuela aprenden el resto de cosas.

Según un estudio, 10.000 horas son la cantidad de horas necesarias para hacerte un virtuoso de los que estés entrenando, en ese caso ¿en que son virtuosos los jugadores?.

Los jugadores tienen una auto-motivación extrema, que hace actuar inmediatamente para sortear un obstáculo combinado con la creencia de que es posible realizarlo. Son personas a las que le gusta más la gente después de jugar con ella y crean vínculos sociales más fuertes a los creados en la vida real.

Cuando jugamos videojuegos somos más felices esforzándonos al máximo que relajándonos y por último a los jugadores les encantan las misiones humanas planetarias para salvar al mundo.

Los jugadores se encuentran más cómodos en el mundo virtual debido a que allí hay gente dipuesta a confiar ciegamente en tí para que realices una misión adaptada a tu nivel de habilidad, lo que no ocurre en la vida real. Además, hay muchísimos jugadores dispuestos colaborar contigo y a ayudarte sin pedir nada a cambio.

Además, su inventigación a creado varios "juegos" donde ocurren situaciones reales pero inspiradas en videojuegos para adaptar a los jugadores a situaciones más reales, como mundo sin petroleo, evoke o superstructure, en esos juegos se les pide a los jugadores que inventen soluciones ante los problemas de un mundo "inventado", aunque puede acabar siendo lo que les ocurra a los humanos.

Opinión personal

¿Pueden salvar los videojuegos al mundo?

 Mi opinión sobre este tema es un poco contradictoria porque opino que los jugadores somos personas que estamos entrenadas para esforzarnos y alcanzar todo objetivo que nos propongamos pero al mismo tiempo esa cantidad de horas que le dedicamos a los videojuegos nos reducen el tiempo que tenemos para cambiar el mundo.

Por lo general, la gente que conozco que disfruta esforzándose al máximo en los videojuegos y que llevan bastante tiempo suelen tener mejores resultados académicos y suelen ser mucho más creativas que otras personas que no juegan de forma tan regular ni tan intensa.

En mi caso, yo he invertido unas 2442 horas, unos 102 días, jugando a un mismo videojuego desde 5º de primaria, y eso se debe únicamente al deseo que tengo de mejorar hasta lo máximo que pueda, y en el total de días jugados a videojuegos desde que nací supongo que superaré los 250-300 días entre todos los videojuegos que he jugado. Para mí, los videojuegos han sido una forma de evadirme de los problemas de mi vida real y de ayudarme en los momentos en los que estaba deprimido o que me sentía impotente antes noticias que veía. 

Los videojuegos son una forma de cambiar las personalidades de la gente a mejor, ya que les haces enforzarse más de forma normal y se crean una  necesidad de mejorar, además de entretener y divertir que son las funciones principales de los videojuegos pero que han variado con la aparición de los videojuegos competitivos.